Grupo Lima no reconocerá al nuevo gobierno de Maduro en Venezuela

Diplomáticos de una docena de países latinoamericanos y de Canadá han instado al presidente venezolano, Nicolás Maduro, a abstenerse de prestar juramento para un segundo mandato después de unas elecciones ampliamente criticadas, diciendo que es la única manera de restaurar la democracia en el país.

El Grupo de Lima, que incluye a Brasil, Argentina y Colombia, emitió el viernes una declaración conjunta en la que pide a Maduro que ceda el poder a la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, hasta que se celebren nuevas elecciones, tras una reunión en la capital peruana.

Trece de los miembros del grupo no reconocerán el nuevo mandato de Maduro y también prohibirán que altos funcionarios venezolanos entren a su territorio tanto como lo permitan sus leyes nacionales, dijo la declaración.

La fuerte reprimenda llega pocos días antes de su toma de posesión del 10 de enero para un segundo mandato de seis años.

México, uno de los más críticos de Maduro, fue el único miembro de la coalición que se abstuvo de votar.

Las relaciones se han calentado bajo la presidencia del izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien fue criticado por invitar a Maduro a su toma de posesión en diciembre.

La’subordinación humillante’.
Incluso antes de anunciar su decisión, la reunión provocó una fuerte respuesta del Ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, quien dijo que la coalición está recibiendo órdenes directamente del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a quien Caracas acusa con frecuencia de encabezar una guerra económica contra el país.

«¡Qué demostración de subordinación humillante!» dijo Arreaza en Twitter.

Lo que hemos afirmando desde la creación de este grupo de gobiernos cartelizados contra Venezuela, al que en teoría no pertenece el gobierno de EEUU: se reúnen para recibir ordenes de @realDonaldTrump por intermedio de @SecPompeo. ¡Vaya muestra de humillante subordinación!

Venezuela, que alguna vez fue un rico productor de petróleo, está sufriendo una prolongada crisis económica con una grave escasez de alimentos y medicamentos y una tasa de inflación que supera el millón por ciento, según el FMI.

El Grupo Lima se formó en 2017 para abogar por una solución regional a la crisis, que ha provocado la huida de millones de venezolanos a los países vecinos.

Inmediatamente después de la reelección de Maduro el 20 de mayo, la coalición dijo que se negó a reconocer los resultados, denunciando que el voto no cumplía con los «estándares internacionales de un proceso democrático, libre, justo y transparente».

Estados Unidos no es formalmente miembro del Grupo de Lima, pero el Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, participó en la reunión por videoconferencia.

La administración Trump considera al gobierno de Maduro como una «dictadura». Ha sancionado a alrededor de 70 altos funcionarios y ha bloqueado a los bancos estadounidenses para que no hagan negocios con Venezuela, lo que ha puesto en aprietos financieros a este país con problemas de liquidez.