La compañía de energía más grande de China, la Corporación Nacional de Petróleo de China (CNPC), está dando marcha atrás en la compra directa de crudo venezolano a medida que Estados Unidos endurece las sanciones contra Caracas.
La CNPC ha cancelado los planes de cargar este mes cerca de cinco millones de barriles de petróleo venezolano en los barcos, informó la Agencia de Noticias de Qatar. Esto viene después de la última orden ejecutiva del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que amenaza a las empresas que hacen negocios con Venezuela.
Se cree que es la primera vez en 10 años que Beijing se niega a comprar petróleo venezolano, y sigue a una reunión entre ejecutivos del CNPC y altos diplomáticos estadounidenses, dijo una fuente a la agencia de noticias Reuters.
Los medios de comunicación chinos e internacionales dijeron que una interrupción en agosto no significaría una ruptura completa en la comunicación entre China y Venezuela por el petróleo.
Washington congeló los activos del gobierno venezolano en los Estados Unidos a principios de agosto. Se espera que el Tesoro estadounidense emita más directrices, pero la administración Trump ha estado intentando desbancar al presidente socialista Nicolás Maduro desde al menos su reelección en 2018.
La orden ejecutiva de Trump del 5 de agosto no prohibía explícitamente a las empresas no estadounidenses hacer negocios con la empresa estatal venezolana PDVSA, pero sí amenazó con congelar los activos estadounidenses de cualquier persona o empresa que se determinara que había «ayudado materialmente» al gobierno venezolano.
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